El tipo de cuenta más común es la cuenta corriente, se caracteriza por no generar intereses y se maneja mediante tarjeta de debito, libreta (cartilla) y chequeras (no siempre). La otra alternativa es una cuenta de ahorros.
Por un cargo anual todos los bancos te proporcionaran una tarjeta de debito que puedes utilizar para pagar en establecimientos comerciales y sacar dinero de los telecajeros. Puedes solicitar una chequera pero los cheques (también llamados talones) no son de uso común en España. Es raro que un establecimiento comercial acepte cheques en pago. Nunca veras a alguien pagar con un cheque en un supermercado o una tienda de ropa.
Los bancos en España trabajan con un sistema muy conveniente llamado domiciliación, el cual permite que las compañías carguen directamente a tu cuenta la facturación por sus servicios. Funciona muy eficientemente y es bastante seguro. Las compañías servicios, como la telefonía, gas, luz y agua, utilizan este sistema a menudo; algunas incluso exigen que el pago se efectue de esta manera. En caso de que prefieras no pagar tus cuentas por esta vía deberás ir al banco de todos modos para pagar personalmente, aunque puedes ir a cualquier banco, no necesariamente al tuyo. El horario para realizar estos pagos es bastante restringido, usualmente entre las 8:30 y las 10:30 de la mañana y en ocasiones solo en ciertos días de la semana (por ejemplo martes y jueves).
La gran mayoría de los cajeros automáticos o telecajeros en España operan con la red 4B (también conocida como Telebanco) o con Servired. Dependiendo de a cual de estas esté afiliado tu banco podrás retirar efectivo de una o de la otra.
Aunque este sistema parezca claro, puede que termines pagando comisiones de más si no eres precavido. Usualmente si utilizas el sistema de tu banco (Servired o 4B) no te cobrarán comisión. Desde recientemente los telecajeros en España te advierten cuando te están cobrando una comisión indicando el monto de la misma. Este cambio tecnológico relativamente sencillo tardó unos años en ser implementado luego de que la regulación fuera pospuesta intencionalmente por algunos bancos. Aparentemente generaban grandes beneficios por estas comisiones.
El horario normal en los bancos es de lunes a viernes desde las 8:00-8:30 de la mañana hasta las 2:00-2:30 al mediodía. Algunos bancos extienden el horario una vez a la semana y/o abren los sábados por la mañana, de 9:00 am a 1:00 pm.
La mayoría de los bancos recorta sus horarios durante los meses de verano (junio-agosto).
Los bancos españoles son muy estrictos en lo que respecta al horario de cierre. Si llegas a una sucursal cinco minutos antes de que cierre no te sorprendas si el guardia de seguridad no te permite entrar. Esto es, claro, a no ser que seas un cliente importante. Dado que después de la hora de cierre continúan trabajando, es posible que te dejen entrar por la puerta trasera.